Las experiencias en cada puerto van a ser inolvidables. Y es que además de disfrutar de las actividades y comodidades que te ofrece el crucero y su tripulación durante los días de navegación, las paradas en los puertos más interesantes van a ser parte de la aventura. Ciudades monumentales, repletas de vida y patrimonio te darán la bienvenida.
El Cristo Redentor es una emblemática e impresionante estatua de Jesús de Nazaret con los brazos abiertos de una altura de 38 metros. Está situada en la cima del cerro del Corcovado frente a Río de Janeiro y es visible desde casi cualquier punto de la ciudad. Asimismo, fue inaugurada en el año 1931.
Uno de los imprescindibles de Río de Janeiro es, sin lugar a dudas, el peñasco conocido como el Pan de Azúcar. Se trata de un domo de granito y cuarzo muy erosionado que alcanza los 396 metros de altura sobre el nivel del mar. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el Pan de Azúcar está ubicado a orillas del océano Atlántico junto al centro de la ciudad.
La playa de Copacabana es otro de los tesoros que no debes perderte en tu parada por Río de Janeiro. También declarada Patrimonio de la Humanidad, esta playa de arena dorada y cristalinas aguas del océano Atlántico tiene un encanto único. Está ubicada frente al centro de la ciudad y alberga un paseo lleno de vida con puestos de comida, bares y restaurantes.
El Museo del Mañana es un museo de ciencias muy interesante e innovador en el que encontrarás cinco áreas principales: Cosmos, Tierra, Antropoceno, Mañana y Ahora. Asimismo, el museo se autoconcibe como futurista y en él se diseñan futuras ciudades sostenibles. Y es que en este museo conciben el "mañana" como una construcción en la que participamos y participaremos las personas.