Las experiencias en cada puerto van a ser inolvidables. Y es que además de disfrutar de las actividades y comodidades que te ofrece el crucero y su tripulación durante los días de navegación, las paradas en los puertos más interesantes van a ser parte de la aventura. Ciudades monumentales, repletas de vida y patrimonio te darán la bienvenida.
El parque de Vigeland es uno de los lugares más atractivos de Oslo. Y es que este parque público posee un encanto sinigual. Además, alberga auténticos tesoros como el puente, la fuente, la rueda de la vida y, sobre todo, el monolito de granito con figuras humanas desnudas entrelazadas.
A orillas del fiordo de Oslo, se levanta la Ópera, un elegante edificio de mármol blanco y cristal con una arquitectura posmoderna. Fue inaugurada en 2008 y es el centro de artes escénicas noruego más importante. Asimismo, el escenario principal se sitúa 16 metros bajo el nivel del mar.
Ubicado de forma estratégica en el fiordo de Oslo, se encuentra la fortaleza medieval de Akershus. Fue construida a finales del siglo XIII y fue utilizada como castillo real. Asimismo, durante el siglo XVII fue modificado en estilo renacentista y rodeado de una fortificación con bastiones. En el siglo XIX, tuvo funciones militares. Además, actualmente también alberga el museo de las Fuerzas Armadas, el museo de la Resistencia y los ministerios de Defensa y de Medio Ambiente.
Creado en 1926, el Museo de Barcos Vikingos es una auténtica maravilla que forma parte del Museo Cultural Histórico de la Universidad de Oslo. Asimismo, las principales atracciones son los fascinantes barcos de Gokstad y Oseberg, ambos datan del siglo IX.